Emprendimiento, la carta del éxito
Marina Bustamante, Jorge Luis
Salinas y Mauricio Diez Canseco, tienen algo en común, una idea, un sueño, un
logro.
Ser emprendedor en la actualidad no
pasa por crear un producto, es
consolidar un idea y hacerla exitosa.
El Perú es el segundo país de mayor emprendimiento, parte de eso incide
en su pluriculturalidad que prevalece en el pequeño empresario peruano.
“Creatividad” el poder romper
esquemas de conceptos tradicionales y buscar muchas formas de generar
demanda; Marcas como Renzo Costa que evolucionaron el mundo de la moda del
cuero, enfocados en diseños exclusivos y accesorios en alta calidad o Emporium
desde el corazón de Gamarra a tiendas por departamentos, rápidamente se
convirtieron de un negocio familiar y en
un emblema de la industria peruana.
El emprendedor ejerce una
“Perseverancia” de no dejarse vencer por
los obstáculos que impone el juego del mercado económico. Los indicadores
sostienen que antes del segundo año de conformada una empresa cae en la
mortalidad tributaria. Todo emprendedor tiene que saber que los retos de mantener
un negocio es difícil, la demanda de productos puede variar en temporadas o épocas; también el entorno económico puede generar un alza en los costó de producción.
Por ello el emprendedor tiene que
ser “Realista” saber cuál es su mercado y conocer sus necesidades, poder dar alternativas,
jugar con lo existente y alternar nuevas posibilidades para el consumidor. Por
eso se dice que el emprendedor marca una diferencia en su producto y en el servicio.
Todo va de la mano con el “autoaprendizaje” seguir aprendiendo, adquirir nuevos conocimientos para fortalecer un
producto con características específicas.
El consumidor adquiere nuevas
necesidades que satisfacer por lo que siempre creara demanda, por eso el mercado
sufre continuos cambios; a eso también se le suma: un manejo de una nueva
administración, nuevo sistema logístico, mejoras en el
servicio. El emprendedor tiene que seguir adquiriendo
conocimientos que responda a estos cambios constantes.
El éxito es el fruto de su
trabajo constante y la eficiencia con la que sabrá lograr los objetivos
trazados. Ningún reto es fácil y todo conlleva a tomar decisiones que acredite
el tener que arriesgarse a cambiar, a evolucionar.
Son “visionarios” que no tienen
miedo en creer en sus instintos, saben su potencial y tiene confianza en sí
mismos.
Pero sobre todo el “liderazgo" que
envuelven a las diferentes características de nuestros emprendedores, hace que
la carta del éxito sea la marca de creatividad con sabor a Perú.
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